martes, diciembre 30, 2008

Crónicas Chuchetas LXVII: No hago balances.

No hago balances porque para eso tengo los cumpleaños. Además que el año nuevo es una excusa para poder gueviar y chupar hasta la madrugada y el ambiente en el aire se respira entrete.




Y por eso mesmo siempre me ha gustado el año nuevo, ir a las fiestas y carretear hasta tarde. Aunque este año será la excepción, porque como ando megacagá de sueño, no saldremos. También hay que sumarle que mi estado de ánimo es entero cambiante y no estoy de ánimos para carretear como lo hicimos el año pasado. Y el antepasado.


Me gusta el año nuevo porque la gente anda como contenta y esperando el gueveo y ponen todas las esperanzas que el que viene será mejor. Como si, en forma mágica, después de las 12:00, todo cambiara. Son buenas las esperanzas, de todas maneras. Claro que yo le sumaría un dicho español: "A Dios rogando, y con el mazo dando".


El secreto de las cosas malas es que es la única manera que tenemos de aprender, es la oportunidad que nos da la vida de entender, valorar y sacar una costra del porte de un buque, pero que nos hace mejores personas o, al menos, un poquito mejores. Durante muchos años estuve sumida en la oscuridad (la frase entera común, pero bastante gráfica) y debo decir con toda autoridad que lo que soy ahora es gracias a esas asquerosidades que me ocurrieron. Y supongo que si me pasara otra cosa muy muy mala tendré mucha pena pero al cabo de un tiempo entenderé.O al cabo de muchos años.


Por eso yo les digo mis amables lectores que no hagan una lista con las gueas malas y la quemen: hagan esa mesma lista y al lado de las gueas malas escriban la lección. Puede ser humildad, menos estrés, valoración de algo, me saqué un cacho de encima, no soy tan pulenta como pensaba, tengo más autoestima, ahora no ando pajaroneando asi que no me robarán de nuevo, porque no le dije que lo quería tanto, y así. Porque si queremos borrar lo malo, tamos malena, porque lo que somos es dual poh.



Harto amor, harto amor y más amor. De ese que una se tiene asi misma y así chorrea a los demás. El 2009 y todos los demás años.

Yao los vemos (el 2009).

lunes, diciembre 29, 2008

Crónicas Chuchetas LXVI: Es normal. (Sí, claro).


Siempre me preguntaba cómo era estar embarazada. Y que me hubiese gustado tener a mano algún tipo de literatura como de verdad (no médica ni media técnica) donde a una le expliquen cómo es estar embarazada con palabras comunes y corrientes.

No lo he encontrado. Así que yo misma seré mi propia guía. (No me queda otra tampoco).

En estos días, por ejemplo, lo que más he escuchado cuando cuento que me siento como el forro son las siguientes dos palabras: "es normal". ¿Normal? Defínanme normal por favor porque yo me siento entera anormal.

Primero, ando con la pulenta cara de poto. El brillo de gueveo característico de mis pepas ya no está. He visto mis ojos vidriosos y cara de cansá en las fotos de esta navidá que recién pasó. Ando hinchá, me canso mucho, tengo una sensación de asco media rara que no me permite comer hasta como las 11 y algunos olores me repugnan, aunque eso es lo de menos, porque de siempre los perfumes dulces me han molestado. Para ir a buscar el auto tengo que andar en micro 5 minutos, y me siento como el forro cada vez que lo hago, pero la pulenta que caminar 20 minutos me da paja eterna después de un día entero en la pega. Ando mega sensible y si me dicen cualquier estupidez (las que yo considero estupideces) me dan: o ganas de llorar o de matar a la persona en ese momento por su gueonez. Me pongo de mal humor en 1 segundo y no tengo paciencia, y si quiero andar rápido no puedo porque, no cacho como, el cuerpo se me frena solo. Me cansan los tacos de los zapatos. Retengo caleta de líquido (más que antes, vagínenselo) y no estoy ni ahí con ir a ver a gente por obligación. Me importa una raja que se enojen o, peor, que se "sientan" (extraña actitud que da para un post completo).

Sé que hay mujeres que se la pasan vomitando los primeros meses, otras tienen nauseas y mareos a cada rato, a otras les sale acné y etc. Pareciera que me quejo de llena. Pero no es así. No me estoy quejando (si ohhh). Estoy dejando una constancia de un hecho: las primeras semanas (se supone que hasta el tercer mes) una se siente como el forro y nadie te lo dice con todas sus letras, sino que te dicen: es normal. Asi es que estoy puro esperando la semana 12 para sentirme bien y no andar dando jugo.

Mención aparte se merece mi Gato. Le ha tocado duro al pobre. Mientras yo me acuesto malhumorada y sin ganas de nada (y más me da rabia sentirme de esta manera) él, mi hombrón, hace todas las cosas sin chistar. Y se acuesta raja de cansado: riega, ve a los gatos, ordena la cocina, ordena la ropa, me atiende, habla por fono, me vuelve a atender, me trae jugo, agua, barre, se pone a bajar música y sin decir ni pío. Y eso que es entero mal genio y pasto seco.

Y aunque les parezca entera gruñona, la verdad es que estoy muy feliz y plena por este niño tan deseado, y tan amado desde antes. Quizás lo que necesito es descansar más y aprender de a poco a escuchar este nuevo cuerpo que tengo.

Pero que me siento mal y como el hoyo es así. Y no estoy ni ahí que sea normal. Quiero saber la pulenta de cómo van las cosas.

Yao los vemos.

martes, diciembre 23, 2008

Crónicas Chuchetas LXV: Seremos padres.




El día que me tenía que llegar la Juana Meneses jue pal recital de Madonna. Tuve todos los síntomas, menos el más importante: la sangrita. Pero como había pasado por unas semanas más o menos pencas, con el Gato pensamos que debía ser el estres porque a algunas amigas y conocidas les ha pasado.




Hasta que comencé a sentirme más cansada de lo habitual, a veces un poco angustiada (sin tener razón alguna), y rara. Pero no hice caso porque desde que dejé de tomar las pastillas nos dijimos que no íbamos a hacer ninguna cuestión y que si quedaba embarazada tenía que ser lo más natural posible. Y me olvidé.



Fue mi mamá que me insistió que me hiciera el test de embarazo. Asi que el Gato (después de sus clases en la nocturna) llegó el miércoles pasado con el test, y apenas lo mie, salió positivo. Igual esperamos los dos minutos pero era recontra positivo.



La pulenta que fue raro para mí. Porque no lo esperaba, y porque, aparte del sueño gigante que tengo, no veía nada anormal. Y comenzamos a avisarle a la familia y amigos cercanos nomás, porque tenía que ir al dostor y venía el viaje a Iquique.


En Iquique me sentí más cansada que nunca, ni bailé en la fiesta (y eso que me encanta bailar) y me bañé poquito en el mar. Aprovechamos harto la poza que tiene el hotel Gavina, pero me sentía entera extraña y quería llegar a mi casita.


Hasta que ayer fuimos finalmente donde el dostor. Me dijo "ver para creer". Y lo vimos. También su corazoncito.

Estoy muy muy muy mega feliz, pero no me le nota. Porque ando con cara de poto, cansada (onda arrastrando las patas), algunos olores me dan mega asco y algunos sonidos como que me estresan. Lo que estoy haciendo ahora es no preocuparme por gueas: si veo a mi jefe histérico yo hago todo con calma y si alguna agilá no contesta el teléfono o me da alguna respuesta gueona y cero profesional, no me enojo. Porque hasta ayer me emputecía.
En fin. Ahora seré madre (chucha, ya lo soy) y mi hombrón padre. Es lo mejor del mundo.
El mejor regalo de navidad. Espero que todos lo pasen con harto amor, harto harto. Es lo único que importa. Na que la estrella de Belén ni que el espíritu navideño entero falso: amor.
Yao los vemos.

jueves, diciembre 18, 2008

Crónicas Chuchetas LXIV: Feliz Navidá y la cacha de la espá.

Estos días mi correo se llena con tarjetas virtuales deseándome una "feliz navidad" y me pregunto qué significa para una que no es católica. Busqué lo que dicen las tarjetas, tratando de encontrarle un sentido, y algunos hablan que ojalá se nos pegue el "espíritu santo de esta navidad"; otro "que nazca el niño Jesus en sus corazones y se renueve nuestra fe" y el úrtimo que encontré: "Que esta Navidad se convierta en el umbral de un año lleno de dicha, amor, felicidad, salud y éxito".






La pulenta que ninguna de esas frases me hace ningún sentido. Porque como no creo en los dogmas de la iglesia católica, que me digan que nació Jesús y la onda me da lo mesmo.
Porque la Navidad es puro comercio, para que estamos con gueas: la gente renueva sus adornos navideños, se encalilla para comprar regalos, anda enojá porque tiene que pasar esa noche en una casa pero en la otra se enojan, cagaos de calor, llenos de lanzas, la plata no alcanza, entre otras miles de cuestiones que estoy seguro que a ustedes solitos se les ocurren.
Para mí la navidad es un pretexto para estar en familia, un día especial en que todos se demuestran el cariño con un regalo, o con algún gesto, se sacan fotos. Lo mejor es cuando hay niños, porque viene todo el cuento mula del viejito pascuero y verles su cara cuando abren los regalos es lo mejor.
También me he preguntado que cuando tenga mis propios mostros les tendré que explicar que en la Navidad algunas personas creen que es un día especial porque nació Jesús en un pesebre, y que otras lo disfrutan porque se juntan a comer rico y a recibir regalos.
Prefiero cuando la gente me desea unas "lindas fiestas" o "que lo pase bien con su familia", porque cuando me dicen "Feliz Navidad" la dura que no cacho que onda.
Y para terminar les cuento (para sacarles pica nomás) que mañana me voy a Iquique a la fiesta de fin de año de mi pega, con todos los gastos pagados (incluye a mi Gato) hasta el fomingo, asi que: lero, lero.
Yao los vemos.


martes, diciembre 16, 2008

Crónicas Chuchetas LXIII: Mi antiguo barrio.

Con el Gato vivimos por casi dos años en el Barrio Yungay. Como muchas cosas de mi vida, fue de pura casualidad que arrendé un depto por esos lares: me quedaba cerca del metro y el depto era bastante amplio. De a poco fuimos conociendo el barrio, cachando su “onda” y los lugares: el Sindicato, la Peluquería Francesa (donde el Gato se corta el lope hasta el día de hoy), la plaza Brasil y sus curaos, la plaza del Roto Chileno donde se ve gente de todas las nacionalidades y hartos negros, Matucana 100, la Biblioteca, la Quinta Normal, el Charro de Oro (comida mexicana baratísima), el Huaso Enrique, el Galpón Víctor Jara y todas sus calles que caminamos por puro gusto y otros lugares más que ahora no se me vienen a la mente.

A pesar que no extraño el depto. (me aburrió vivir en ellos) extraño harto la vida de barrio. A una cuadra teníamos una pulenta feria, donde les comprábamos siempre a los mismos caseros, los saludábamos y hasta nos despedimos cuando nos fuimos. Teníamos también a nuestro dealer de películas, el Ángel, que siempre que nos veía temprano en la feria nos gritaba de donde nos viera que si acaso nos caímos de la cama, que nos devolviéramos a la casa sino el día se iba a echar a perder. También los quiltros del barrio: la Muñeca (una siberiana) que llegó de repente y ni molestaba; y el Hacha, un quiltro que llegó un invierno que hizo mucho frío (el 2006 me parece) y cuando salíamos en la mañana temprano a trabajar lo veíamos todo enrolladito y flacuchento con una capa toda roída. Hasta que lo aguacharon y después se puso guatón, balsúo y si una le iba a hacer cariño, te mordía. El Hacha duerme en una casa que le hicieron los vecinos con la Muñeca, en la calle. El otro quiltro era el Chasquita, feo y choro como él solo, se paraba en medio de la calle y los autos tenían que hacerse a un lado, por más que nosotros lo llamábamos para que no le pasara nada. Hace poco pasamos por el barrio y tenía una pulenta casa.

Mi favorito lejos es el Patán Mario, mezcla de quiltro con labrador. Su amo es el Luis, que tiene un negocio que nunca cierra, con unos horarios que nunca entendimos, donde comimos la marraqueta más rica. El Patán es el fundido de toda la gente del barrio (y convive lo más bien con el Hacha y la Muñeca), guatón y regalón.

Me gusta mucho la vida de barrio, la verdad. A pesar de las vecinas copuchentas, algunos ruidos y la música mala del vecino que no falta.

Estoy volviendo a vivir como me gusta. Y eso me tiene contenta.

Yao los vemos.

jueves, diciembre 11, 2008

Crónicas Chuchetas LXII: Ayer jui a ver a Madonna.


Como soy terrible de importante en mi pega, no pude salir antes y tuve que trabajar hasta las 18:30 igual que siempre. Obvio que es talla, lo que pasa es que encuentro un resto balsa irme antes por un recital, además que no hubiera podido. Por muy fanática que sea de Madonna, cuido mi pega.
La cosa es que entre que el Gato me vino a buscar, a mi jefe se le ocurrieron mil cosas a última hora, estacionar el tocomocho donde mi hermana (nos queda mucho más cerca del estadio que el de la pega) llegamos al Nacional tipo 8:15. Igual hacía más calor que la chucha y ni nos revisaron. Es que no tenemos cara de pungas, lo somos por dentro.
Pa' entrar a andes igual era como lejos, y yo toda desesperá como que entre que corría y apuraba al Gato. Caché unas poleras blancas tipo musculosas de mina que decían "Madonna" (obvio) pero costaban 15 lucas asi que nica. Encontramos asientos a un costado del escenario, osea, no veíamos de frente, pero no me importó porque yo quería ver a Madonna. Tocó Paul Oakenfold (muy gueno) y en esa espera sapié a la gente. ¿Y qué vi? Minas enteras producías (yo siempre voy lo más cómoda a un recital, osea sin tacos), hombres guatones tratando de parecer lolos, y gente piola. Las minas que estaban sentadas al frente de nosotros como que no tenían mucha cultura de recital y cuando alguien se paraba frente a ellas como que se molestaban, y de repente yo le digo al Gato que ojalá no cante la canción esa de Evita, y una de ellas se da vuelta y me dice: con que cante Crazy for you yo estoy feliz. Entonces la pregunta interna jue: ¿y no cachó el track list? Porque yo lo llevé impreso pa' cachar canción por canción, y me parece que desde hace como 25 años que Madonna no canta Crazy for you en un recital.
Y me tuve que acordar del recital de Soda Stereo: lleno de gente sin onda, que no cachaban nada más que las canciones más conocidas y si tocaban la última del lado b del casete (para que se entienda la idea) ni la tarateaban, porque se quedaron en los ya apestosos 80, por lo menos a nivel musical/radial. Vibraban sólo con las más conocidas y que ya ni me gustan de tanto que las tocan y las tocan. Lo mismo con estas lolas. ¿Pa' que van al recital si ni cachan el último disco? Lo bacán de ir a un recital es estar con gente que sea fanático como uno, que cante a todo chancho, que baile y que se sepa todas las letras. Eso jue por lo menos lo que yo hice todo el rato, porque pensaba que quizás cuando volveré a ver a Madonna y cantar las canciones que me gustan y en vivo y en directo. Y como soy entera viva y no agilá caché cuando tocaba mi favorita de su último disco y la canté a toda chancho.
A la salida me compré mi cintillo entero pulento y llegué terrible de tarde a mi jato, asi es que hoy ando cagá de sueño pero no me importa. Y si hubiera podido, me repito el recital hoy día.
Yao los vemos.

miércoles, diciembre 10, 2008

Crónicas Chuchetas LXI: Thispo.



La otra vez leí en el blog de Kala sobre la anorexia y quedé recontra impactada. Y hoy, navegando nosedonde, encontré unos blogs tan pero tan tristes sobre estas pobres niñas y su problema. Y encontré este otro concepto: Thispo.


Buscando definiciones en foros y páginas, es más o menos un juego de palabras en inglés, que sería así:

thin: delgado
inspiration: inspiración
thinspiration: inspiración para ser delgado


Acá les dejo la definición de una anoréxica en un foro: …ser una thinspo??como tu modelo a seguir en tu reto para añcanzar a tner su cuerpo¿si es eso, la mia es Lindsay Lohan, es bellísima y tiene un cuerpo de escándalo. Me gustaría a ser la mitad de lo q ella es, y a ser como una super actriz ya puede estar bien o destrozada q publicamente aparentará siempre lo contrario, lo conseguí durante años, pero stoy perdiendo facultades, ya no sirvo ni xa eso.




La anorexía y bulimia la llaman "ana y mia". Tipeenlo en google y se van a llevar muchas tristes sorpresas. Encontré dos blogs muy tristes: uno de ellos, el nick es "triste princesa" donde anota las calorías que consume día a día y los ejercicios que hace. Me puse a leer todo su blog para entenderla un poco (ya saben que tengo poca pega) y ella misma cuenta "mi vida con Ana": ...Mi vida con Ana empezo bastante tiempo atras , mas o menos cuando cumplí los 12 , diría que casi sin darme cuenta , recuerdo un dia que yo estaba muy cansada porque no habia estado en todo el dia y cuando llegué a mi casa encontré un paquete de galletitas y comí algunas , cuando me ven mi mamá y mi abuela me dicen : " siempre lo mismo , estás comiendo todo el día . . . "Y desde ese día las comidas fueron 1 o dos por día , pesaba 52 en ese entonces y llegue enseguida a los 47." Para esta triste princesa "Ana" es su amiga, la ama y así logra adelgazar y bajar de peso de una manera horrorosa. Y tal como dice su nick, siempre siempre siempre está triste y angustiada. Incluso va día a día anotando un "reporte" de cuántas calorías consume y qué tipo de ejercicio hace, y por cada uno se da un puntaje. Leí para cachar de dónde se sacaba el puntaje, pero no lo encontré. Hay un día que no come nada, pura agua y caldos. Muy triste.


La otra es "gorda infame" y en su blog se describe y termina con Lo único malo es que a veces soy una potencial suicida. La pobre se corta, se encuentra gorda, fea y se encierra en su casa a puro adelgazar. Va a la sicóloga, la engaña, sufre por su novio, pone puras fotos de modelos desnutrías y escribe que es una cerda asquerosa, escribe su peso, se angustia porque baja nada, porque se cansa y decide estar todo el día en la casa hasta adelgazar 12 kilos. Y se da atracones de comida, se corta como castigo, y así sigue su vida.
Lo que puedo reflexionar después de leer a estas pobres niñas es la media responsabilidad que tengo cuando sea mamá, si es que tengo una mostra. Sobre criar mujeres seguras, que no se deje influenciar por las modelos desnutrías que salen en la tele o las mismas minas que animan o actúan, que cada vez están más flacas y dicen en las entrevistas que son secas para los chocolates, como si una fuera gueona y les creyera.
En fin. Leí puras cosas tristes, pura desesperanza, autodestrucción. Ojalá los papás de estas niñas estuvieran más alertas, porque muchas veces lo que les ocurre viene por los papás que tienen. La marca indeleble de nuestra niñez, dicen.
Hoy Madonna, a ver si les cuento como me jue.
Yao, los vemos.
(La foto la saqué de un blog de una niñita que las usa como Thispo)

lunes, diciembre 01, 2008

Crónicas Chuchetas LX: Soy Secretaria.

Hoy me llaman por teléfono todos los jefes, me regalan flores y me llegan tarjetas virtuales. Porque yo también soy secretaria.

Venía en el auto pensando en las cosas de la vida porque jamás pensé en serlo. A decir verdad, nunca tuve muy claro qué hacer una vez que saliera del colegio, sólo me gustaba leer y escribir. Igual que ahora nomás.

La cosa es que me puse a estudiar Derecho y al tercer año dije hasta aquí nomás llego. Era una alumna bastante mediocre (me gustaba Historia del Derecho harto eso sí) y mi papá, sabiamente, me dijo que me pagaba una pura cuestión más. Entonces me puse a buscar y pensaba que sí ya tenía 22 años y volvía a estudiar otros cinco años más recién cerca de los 30 me iba a independizar y esa guea si que no me gustó. Entonces me jui al Manpower. Me fue terriblemente bien porque de estudiar todo el día a estudiar 3 hojitas para una prueba era entero papa. No falté jamás a clases aunque era como colegio de monjas en esos años: no dejaban entrar hombres, las profesoras te vivían corrigiendo la postura, que no comas chicle, entre otros. No tengo amigas de esa época porque era todo tan raro para mí, que siempre estuve en un ambiente mixto de pronto ver puras minas que se peleaban por puras gueas y un día eran íntimas y al otro se odiaban. Lo bueno que como jui guena alumna pude hacer la práctica en forma interna y terminé el año con sueldo de secre. Y lo primero que hice fue comprarme lentes de contacto, cosas que mis papás nunca hicieron porque yo era entera destrozona. Ahora un resto menos.

Y así comencé a ganar plata y tener cuenta corriente cuando mis amigos todavía estudiaban y me tuve que mamar la cara de que yo era penca de mucha gente porque soy secretaria, esa onda que te miraban en menos. Incluso una vieja bigotúa (la tía bigote) me dijo que penca lo que había estudiado, como que la había cagado. En fin. Otra vez un grupo de agueonaos hicieron un brindis porque eran todos profesionales y me miraron con cara de pucha que lata que tú no.

Igual me ha costado aceptar mi destino de agilamiento nomás. No ha sido fácil para mí como el autoaceptarme en esta pega, porque me gustan otras cosas. Y he estado en trabajos donde no te valoran, pero ahora con el tiempo he entendido que los errores eran culpa mía que no paraba los carros y que de pura gueona no cobraba más. Hasta que renuncié donde los gringos y me puse a pedir más plata y llegué a esta pega. Y me gusta este trabajo, la gueá rara. Es que con la plata que me gano, más los beneficios que tengo, puedo hacer las cosas que me gustan. Y hago bien mi pega, encuentro yo. Me mando hartos condoros igual, porque a veces soy media volá.

En la evaluación del año pasado uno de mis jefes me dijo que yo tenía dos cualidades muy buenas: buena presencia y buen trato. Y me deprimí, porque me hubiese encantado que me dijera que yo era inteligente y rápida, por decir algo. Pero después caché que esas cualidades son importantes para el puesto que tengo y la gente que veo, ya que "topé techo" como quien dijera, soy así como ser la secretaria de la Presidenta. Entonces por lo mismo yo no veo papeleo latero ni facturas ni nada de eso que muchos verán en muchas de las secretarias que los rodean, de hecho tengo poca pega en general y leo el diario y navego en internet y cero rollo, pero mis responsabilidades son otras y sobre todo la información que manejo es enteramente y terriblemente confidencial. En serio.

Debe ser que tengo 35 años, que con el Gato me siento 100% plena que he ido como entendiendo muchas decisiones que tomé que me hicieron llegar hasta acá. Igual ahora soy traductora y tengo un diplomado de la Católica para secres asi es que soy entera bacán. Y también se agradece el cambio respecto al rol que nosotras tenemos en la "gestión empresarial", porque eso de escribir cartitas y contestar el puro fono ya quedó atrás. Y gracias al haber estudiado en Manpower siempre se me abrieron todas las puertas pa las pegas.

Tengo un montón de historias pa' contar, pero ya está gueno ya.

Feliz día a todas las secres.

Yao los vemos.